- Te debo una. A decir verdad, parece casi como
[cdb]si hubieses esperado a que necesitase ayuda.
- No diré lo contrario.
Que la mismísima Emperatriz me deba un favor es...
- Bueno, supongo que ya estamos en paz.
- Pero tú sigue llevando la cuenta, Claude.
- No pienso perderla, Edelgard.
Tú pídeme todos los favores que quieras.
- ¿Todo el mundo listo para partir?
Es hora de demostrarles... ¡el poder de Leicester!