Tengo deseo de aprender más acerca de mercenarios.
Es tema de mucha fascinación para mí.
Eh, claro, supongo. Pero creo que ya te he hablado
[cdb]de los aspectos más emocionantes.
Eso no puede ser.
Cada palabra que tú dices está llena de emoción.
Tú da a mí más información. Por ejemplo,
¿estás tú recibiendo pago por tu trabajo aquí?
Claro, tengo un contrato con Edelgard.
Claro, tengo un contrato con Dimitri.
Claro, tengo un contrato con Claude.
Y es bastante lucrativo, como es de esperar.
Supongo que me tiene en alta estima.
Tú dijiste que dinero es importante para soldados
[cdb]de fortuna.
Pero ¿y si enemigo ofrece pago más grande?
¿Tú aceptas?
Decir que rechazarías el dinero.
Decir que ningún buen mercenario es tan corrupto.
¿Bromeas? Lo largaría antes de terminar de hacerme
[cdb]la oferta. Pero muchos otros mercenarios
[cdb]no harían lo mismo. El oro manda.
Aun así, si un enemigo puede pagar más
[cdb]que tu patrón, eso quiere decir que tiene
[cdb]buenas probabilidades de ganar.
Haría falta algo más que eso para hacer
[cdb]que un verdadero mercenario cambiase de bando.
Aun así, si un enemigo puede pagar más
[cdb]que tu patrón, eso quiere decir que tiene
[cdb]buenas probabilidades de ganar.
Y, si te gusta respirar, no querrás acabar
[cdb]en el bando perdedor.
¿Así que en Fódlan uno debe intentar ser aliado
[cdb]de bando con más riquezas?
Bueno, verás, la confianza también es una moneda.
Digamos que aparece alguien con mucho oro
[cdb]y te pide que cambies de bando. Parece tentador, ¿no?
Pero debes tener cuidado. Podrías aceptar su oferta,
[cdb]acabar descubriendo que no existe ningún dinero
[cdb]y que lo que de verdad quiere el tipo es verte muerta.
Y, para empeorar las cosas, el patrón honesto
[cdb]al que has traicionado ahora sabe que eres tan fiable
[cdb]como un caballo con tres patas.
A lo que me refiero es que, para un mercenario,
[cdb]la integridad importa más que el dinero.
Tendría que haber empezado por ahí.
Yo entiendo.
Confianza es de importancia para todos,
[cdb]pero mucho más para soldados de fortuna.
Lo has entendido. Ah, y, según mi experiencia,
[cdb]la gente que te contrata para los mejores encargos
[cdb]ya lo sabe todo de ti antes de hacerte la oferta.
Pero la otra cara de la moneda es que,
[cdb]si eres un patrón que deja a los mercenarios
[cdb]en la estacada, ten por seguro que se correrá la voz.
Ya es bastante difícil sobrevivir sin esas tonterías.
Esa es cosa que todos compartimos juntos.
Nosotros queremos seguir respirando, como tú dices.
¿Y si yo te ofrezco un encargo? Nosotras estamos
[cdb]en mismo bando. ¿Es eso traición?
Brigid es tierra de riquezas.
Nosotros podemos ofrecer mucho por fortuna
[cdb]de una soldado como tú.
Responder de forma positiva.
Pasar de la oferta.
Parece tentador, pero... No, no puedo.
Antes tengo que terminar con mi contrato actual.
Lo siento, Petra. No estoy disponible
[cdb]hasta acabar con mi contrato actual.
Además, ¿no acabamos de hablar de lo malo que es
[cdb]abandonar un encargo antes de terminarlo?
¡Ja! Yo sabía que tú rechazarías.
Tú eres una modelo de mercenario.