No me puedo creer que el conde de Gloucester
[cdb]nos haya traicionado. ¡El enemigo ha recuperado
[cdb]el control del Gran Puente de Myrddin!
Ahora que nuestras tropas están atrapadas en terreno
[cdb]de la Alianza, las Casas Riegan y Gloucester
[cdb]las han rodeado por ambos flancos.
Sin duda, se trata de otra de las astutas estratagemas
[cdb]de Claude. Me duele admitirlo.
No lo entiendo. El historial de enfrentamientos
[cdb]entre los Riegan y los Gloucester es bien conocido.
¿Por qué habrán decidido hacer las paces ahora?
A menos que su supuesta enemistad no sea más
[cdb]que una red que Claude ha tejido para la ocasión.
Puede que sí, puede que no.
Por lo que sabemos, quiere que le demos vueltas
[cdb]a la situación y cometamos un error aún mayor.
Actualmente, las fuerzas de Ferdinand están atrapadas
[cdb]tras las líneas enemigas.
El ministro de Guerra está avanzando
[cdb]a toda velocidad para recuperar
[cdb]el Gran Puente de Myrddin.
Pero me temo que no tiene un ejército lo bastante
[cdb]grande como para alcanzar a nuestros camaradas
[cdb]aislados antes de que acaben con ellos.
No podemos quedarnos de brazos cruzados mientras
[cdb]nuestros aliados están en peligro.
¿Qué opinas, Hubert?
Ya me he tomado la libertad de contratar
[cdb]a varias compañías de mercenarios prometedoras.
Les he dado instrucciones de entrar en secreto
[cdb]en el territorio de la Alianza y proporcionarle
[cdb]apoyo a Ferdinand.
¿Por qué no se me ha informado de esto?
Je. Desde el principio ya tenía mis dudas
[cdb]acerca de Ferdinand y su habilidad de guiar
[cdb]a nuestras tropas hacia la victoria.
He pagado a estos mercenarios con mi propio dinero,
[cdb]por eso no fue necesario informar de ello.
¿Y crees que llegarán hasta él a tiempo?
Sí. Resulta que están bastante familiarizados
[cdb]con el terreno. Estoy seguro de que demostrarán
[cdb]valer lo que he pagado por sus servicios.
Vaya, Hubert. Y pensar que tu total falta de fe
[cdb]en Ferdinand podría ser precisamente lo que
[cdb]le salve el pellejo.