- ¿Los habéis perdido de vista?
- Me avergüenza admitirlo, pero sí.
Es posible que algún mago haya hecho desaparecer
[cdb]a los bandidos.
- Pero ¿por qué alguien se esforzaría tanto
[cdb]por un puñado de bandoleros?
- Muy bien. Seguiremos el olor de la sangre.
- Por supuesto. Seguiremos... Espera, ¿qué?
- Nos vamos. ¡Seguidme!
- ¡Espera, profesor!
- Debe de tener alguna pista sobre la dirección
[cdb]que tomaron los bandidos. Sigámosle.
- Profesor Jeritza, ¿adónde vas?
- Bueno, habrá deducido la ubicación de los bandidos.
Deberíamos seguirle el ritmo.
- Eh, ¿profesor Jeritza? ¿Vas a...?
- Se ha ido. Supongo que será mejor que lo sigamos.
Al fin y al cabo, esto sigue siendo una misión.
- Patético.
- Profesor Jeritza, no deberías avanzar solo.
Es demasiado peligr... Un momento, ¿qué es esto?
- ¡Ah! ¡B-bandidos!
- Los he matado.
- Ciertamente parecen haber fenecido.
¿Son estos los malhechores que debíamos despachar?
- ¿Cómo podríamos saberlo?
Todos los burdos rufianes se parecen entre sí.
- ¿Lo sabes tú, profesor?
¿Estabas siguiendo alguna pista?
- No, pero son ellos.
Intentaban escapar hacia esa fortaleza.
- ¡¿Esa fortaleza?!
- Sí, Caspar, eso es lo que ha dicho.
¿Tienes algo que contarnos?
- No, es solo que parecía sospechosa.
- Eres de lo que no hay, Caspar. Aun así,
[cdb]supongo que tienes razón, el lugar parece sospechoso.
- Estamos cerca de la frontera entre el Reino
[cdb]y el Imperio, pero eso no es
[cdb]un puesto fronterizo imperial.
- Tampoco es del Reino, y no parecen ondear
[cdb]ningún estandarte. Será una guarida de bandidos.
- Entonces da tú a nosotros permiso para asaltar
[cdb]base de ellos y aplastarlos.
- Hacerlo sin ayuda tal vez sea demasiado peligroso
[cdb]para nosotros, Petra.
- ¡Sí! Quiero decir..., estoy de acuerdo.
Deberíamos, eh, irnos a casa. De inmediato.
- Pero los bandidos podrían estar dentro,
¡y deben pagar por sus crímenes!
- Es nuestro deber como nobles acabar con ellos
[cdb]antes de que puedan herir a otra pobre alma.
- Esto no tiene nada que ver con ser nobles,
[cdb]solo se trata de hacer lo correcto. ¡Y acabar
[cdb]con los malos es mi forma favorita de hacerlo!
- Sugerir esperar.
- Sugerir atacar la fortaleza.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Vaya. No te tenía por una persona cautelosa,
[cdb]pero tal vez sea lo más sensato.
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- ¿Desde cuándo eres tan [MFH:enérgico_enérgica]?
Ah, cierto, desde siempre.
- Ya basta. Nosotros no tomamos la decisión.
¿Profesor Jeritza?
- Continuaremos con la misión. Entrad en la fortaleza.
Acabad con los bandidos que encontréis.
- No hay señales de vida.
Tal vez ya esté todo el pescado vendido.
- Yo pensé que la misión era acabar con bandidos.
¿Tú estás comprando pescados, profesor?
- Solo es una expresión, Petra. Se refiere a que,
[cdb]probablemente, ya no quede nadie aquí.
- Ah, yo ya entiendo. Yo te concedo las gracias.
A veces este idioma tiene mucho peculiar.
- Si ya hemos acabado con eso, preparémonos.
Aseguraos de estar listos antes de partir.
- Profesor, no parece acertado cargar sin considerar...
¿Eh? ¿Qué es esto?
- Por el aspecto que tienen, serán bandidos.
O lo eran.
- Los he matado.
- Vaya... Espera, ¿son estos los malos que buscamos?
- Seguramente.
Los sorprendí cuando intentaban escapar
[cdb]hacia esa fortaleza.
- Interesante. Ese debe de ser su fuerte.
- En ese caso, será mejor que acabemos con todos
[cdb]antes de que les hagan daño a los aldeanos de la zona.
- Han huido con el rabo entre las patas,
[cdb]esto debería ser fácil. Vamos allá.
- Quieto parado. ¿A nadie más le resulta alarmante
[cdb]la presencia de esta fortaleza?
- Estoy de acuerdo.
Si este es su fuerte, ¿por qué no hay señales de vida?
- Podría ser una trampa para atraernos.
- Sugerir esperar.
- Sugerir atacar la fortaleza.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Estoy completamente de acuerdo.
¡Fijaos en lo sombrío y aterrador que parece el lugar!
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- Yo no llegaría a tanto,
[cdb]pero es cierto que debemos ir a investigar,
[cdb]especialmente si el lugar nos da mala espina.
- Nosotros no tomamos la decisión.
- Es verdad. Esto es una misión.
La decisión debe tomarla el profesor Jeritza.
- Entrad en la fortaleza.
Acabad con los bandidos que encontréis.
- Pero ¿no será peligroso hacerlo sin ayuda?
- Solo quedarán unos pocos bandidos.
No deberíais tener problemas.
- Intervendré, si es necesario.
- Hablas con mucha confianza,
[cdb]pero esto me sigue dando mala espina.
- Preparaos para lo peor.
Como se suele decir: sin esfuerzo no hay recompensa.
- Alteza, si la cosa se pone fea, quedaos detrás de mí.
- Si la cosa se pone fea, me retiraré.
Y espero que todos los demás hagáis lo mismo.
- Estoy listo para asaltar esta fortaleza.
Veamos si la fortaleza está igual de preparada.
- Con el profesor a nuestro lado,
[cdb]seguro que no nos pasará nada.
- Entonces está decidido. Manteneos alerta.
- ¡Tranquilo, profesor! Nos lo estás poniendo difícil...
Oh. Vaya, qué sorpresa.
- ¡¿Qué le ha pasado a esta gente?!
- Los he matado.
- ¿Son estos los malhechores
[cdb]que hemos estado buscando?
- ¿Quién sabe?
No se puede saber si son bandidos con solo mirarlos.
- ¿Qué opinas, profesor?
¿Son los malvados que estábamos buscando?
- Seguramente.
Los sorprendí cuando intentaban escapar
[cdb]hacia esa fortaleza.
- ¿De verdad tiene que ser tan tenebrosa y aterradora?
- Si intentaban huir para refugiarse en ella,
[cdb]debe de tratarse de su guarida.
- ¡Entonces pongámonos en marcha
[cdb]y tomemos el lugar por la fuerza!
Puede que hasta encontremos algo de equipo.
- Estoy de acuerdo. Como nobles, sería negligente
[cdb]por nuestra parte permitir que el pueblo
[cdb]siga sufriendo a manos de estos bellacos.
- ¿Y quieres entrar ahí? Vale, ¿sabes qué?
Creo que me quedaré aquí para asegurar la zona.
- Marianne, te quedas conmigo, ¿verdad?
- Por supuesto.
No deberíamos ir a un lugar tan peligroso.
- Sugerir esperar.
- Sugerir atacar la fortaleza.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Atacar una fortaleza enemiga sin saber
[cdb]qué nos aguarda no es una idea muy inteligente.
Deberíamos esperar por el momento.
- Estoy de acuerdo. La precaución suele ser la parte
[cdb]más importante de la valentía.
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- Seremos héroes si conseguimos eliminar a toda
[cdb]una fortaleza llena de bandidos.
¡Me encantan estos planes!
- ¡Sí, déjamelos a mí! Los aplastaré como a insectos.
- Parece que hay división de opiniones.
Pero esto no deja de ser una misión.
- Y eso significa que la toma de decisiones
[cdb]está en manos del profesor Jeritza.
- Entrad en la fortaleza.
Acabad con los bandidos que encontréis.
- Pero...
- No hay de qué preocuparse. No veo señales de vida.
Probablemente solo queden unos pocos bandidos,
[cdb]si es que no han muerto todos.
- Preferiría eso último.
- Mi abuelo me dijo que los fuertes abandonados
[cdb]están llenos de espectros.
- ¡¿Espectros?! Quiero decir, eh, qué infantil.
Todo el mundo sabe que no existen.
- Estamos buscando forajidos, no fantasmas.
¿Podríamos acabar con esto de una vez?
- Lysithea, no me digas... ¿Sabes qué?
Mejor me ahorro la pregunta.
- Debéis de estar muy confiados,
[cdb]ya veo que os estáis tomando esto muy a la ligera.
Tened cuidado, podrían cogeros por sorpresa.
- Sí, tendremos que guardarnos las espaldas
[cdb]los unos a los otros. ¡Mantened los ojos bien abiertos!