Siempre vas un paso por delante de mí,
[cdb]mas esta es mi oportunidad de eclipsarte.
Tómatelo con calma, Ferdinand.
No tienes nada más que demostrarme.
¿Sigues queriendo hacer esto, Ferdinand?
¿Por qué no dejas que me ocupe yo?
¡Qué disparate! Mi deber es ayudarte.
Mira lo que hemos logrado juntos.
Si seguimos así, el Imperio prosperará,
[cdb]no me cabe duda.
Eso espero, aunque no sé qué tendrá que ver
[cdb]una cosa con la otra...
Siendo generosos, la comida de aquí se podría
[cdb]considerar a lo sumo como pasable. Mas, al menos,
[cdb]tengo el honor de compartirla con [MFH:vosotros_vosotras].
Tendrías suerte de poder encontrar platos
[cdb]como los que sirven en las mesas de las casas nobles.
Je. Esto me recuerda a nuestra juventud.
Tal vez debería retarte a otro duelo para ver quién
[cdb]de los dos termina antes su plato.
Solo si pretendes que cuestione tu cordura.
Me alegro de que aprendiésemos a disfrutar
[cdb]de la comida con tranquilidad.
Seguro que podrías haber elegido a un oponente
[cdb]más fuerte... pero ¡allá voy!
¿Más fuerte que tú? ¿A quién esperas que elija?
¿Al conde de Bergliez?