- ¡Escucha, chico! ¡No te lo vas a creer!
- Judith, ¿no crees que podrías dejar de llamarme
«chico»? Ahora soy tu intrépido líder, ¿recuerdas?
- A ver, cuéntame qué ha pasado.
- Quizá prefieras sentarte antes...
El monasterio de Garreg Mach ha caído.
- Ni siquiera los magníficos Caballeros de Seiros
[cdb]han podido con la superioridad numérica rival.
- Espera, ¿cómo? No es posible. Deberían estar
[cdb]a varias jornadas del monasterio aún.
- ¿Cómo han llevado a un ejército de ese tamaño
[cdb]a las puertas de Garreg Mach tan rápido? A no ser...
- Esto no puede estar pasando. ¿Ha cambiado de bando
[cdb]el conde de Gloucester? ¿Y Acheron también?
- Me temo que ambas casas defienden ahora
[cdb]los colores del Imperio.
- La Casa Phlegethon les cedió el paso al norte
[cdb]del Gran Puente de Myrddin, y los Gloucester
[cdb]dejaron que avanzaran.
- ¡Condenados embusteros!
- Cuando les advertí de que el Imperio iba a reclutar
[cdb]un ejército, no dejaron de presumir y alardear
[cdb]de que ellos protegerían la frontera.
- Pero parece que el Imperio ya los tiene de su lado.
Todo esto es culpa mía por no haber estado atento.
- Me da que no había nada que hacer, intrépido líder.
Todos estos tejemanejes se fraguaron por carta.
- Pero ahora he perdido mi ventaja...
y frente a Edelgard, ni más ni menos.
- Ahora puede presentarse ante la Alianza
[cdb]en son de guerra. Es... un problema muy serio.
- ¿Qué sucede?
- Señor, tenemos una visita inesperada.
Es, mmm, lord Holst, de la Casa Goneril.
- ¿Holst? ¿Qué hace en mi puerta el hombre más fuerte
[cdb]de Leicester? Además de pensar en derribarla, claro.
- Podéis preguntárselo vos, señor. Aquí está.
- Señor, perdón por venir sin previo aviso.
- Estaba cerca de Derdriu cuando me dieron
[cdb]las noticias sobre Garreg Mach.
- No sabía que andabas por nuestros bosques, Holst.
Por favor, pasa. Estás en tu casa.
- Por avatares del destino, resulta que justo
[cdb]estaba dándole vueltas al mismo problema.
- ¿Esperabas eso del conde de Gloucester?
Nos ha traicionado como si nada.
- Si no gestiono la situación con el Imperio
[cdb]con delicadeza, la Alianza se fracturará.
Es el momento ideal para darme un buen consejo.
- O que me ofrezcas tu fuerza.
La acepto si es lo que tienes.
- He venido para ayudar en lo que pueda.
- Debemos trabajar juntos por la seguridad
[cdb]de Leicester... y, sobre todo, por su libertad.