Que el otro día te metiste en una pelea
[cdb]con unos soldados.
Ah. Eso. No te preocupes, no volveré a hacerlo.
Uno de mis hombres me contó lo que había pasado
[cdb]en realidad.
Parece ser que uno de tus soldados se estaba mofando
[cdb]del heredero de la Casa Gautier...
que resulta que soy yo.
Luego empezó a hacerlo con todo el mundo,
[cdb]que fue cuando decidiste meterte.
La peor decisión de mi vida, pero, como ya he dicho,
[cdb]todo eso se acabó.
Solo me metí porque creí que era mi responsabilidad
[cdb]hacer que mis hombres actuaran con sensatez.
Pero a menudo mis puños se mueven más rápido
[cdb]que mi cerebro, eso ya lo sabes.
Sí, lo sé muy bien. Aun así, tengo curiosidad
[cdb]sobre por qué no me lo contaste en el momento.
Porque dijo cosas muy desagradables sobre ti.
No quería que tus delicados oídos se horrorizaran
[cdb]al oírlo.
Vale, ahora tengo aún más curiosidad...
Sea como fuere, perdona que te regañara
[cdb]sin conocer la historia al completo.
No, soy yo quien debería disculparse. No puedo dejar
[cdb]que mi vida personal afecte a lo profesional,
[cdb]incluso si tiene que ver contigo.
No deberías preocuparte. Que la gente hable
[cdb]mal de mí es algo que pasa a menudo.
Y ¿sinceramente? Me merezco todo lo que digan.
Era un verdadero canalla en mis días mozos.
Le causé dolores de cabeza a muchas personas.
Ese tipo de habladurías no son culpa tuya
[cdb]ni de tus soldados. La culpa es exclusivamente
[cdb]del hombre que yo solía ser.
¿Y por qué no hiciste algo al respecto
[cdb]cuando eras más joven?
Era solo... Tenía que ser de esa forma. Debía jugar
[cdb]el papel del pícaro frívolo y despreocupado porque...
Bueno, mira, sé que soy una buena pieza,
[cdb]pero es que así soy yo.
Vale. Quizá te merezcas que se burlen de ti.
Pero no lo permitiré viniendo
[cdb]de un puñado de chuchos que no saben nada de ti.
Puede que aún no tengas el título de marqués,
[cdb]pero aun así resultas bastante útil.
He visto cómo ayudabas al cernícalo y...
cómo me ayudas a mí, supongo.
Vaya, Felix. Eso es... vaya.
Uf, creo que hay alguien cortando cebolla por aquí.
¡A callar! ¿Es que no puedes escuchar a alguien
[cdb]dos segundos sin tener que abrir esa bocaza tuya
[cdb]y arruinar el momento?
Siempre has sido demasiado listo y desvergonzado
[cdb]para tu propio bien, aunque nadie puede igualarte
[cdb]en cuanto a tácticas militares y asuntos de interior.
Tal y como dijiste: tenemos problemas apilándose
[cdb]tanto dentro como fuera del Reino.
Pero gracias a ti quizá podamos salir airosos de esto.
Esos son muchos problemas que endosarle
[cdb]a una sola persona. En especial si no es ni la mitad
[cdb]de bueno de lo que insinúas.
A ver, ¿puede que sea un siete por ciento más astuto
[cdb]que tú? Sí, pero eso es todo.
Si de verdad queremos ser útiles para Faerghus
[cdb]y Dimitri, debemos trabajar juntos para compensar
[cdb]las debilidades del otro.
Supongo que es cierto.
En cuyo caso, supongo que cuento contigo.
Hasta quizá... te necesite. Quizá.
Además, sin ti, acabaría rodeado de tipos hoscos
[cdb]y miserables. No creo que pudiera aguantarlo.
No tienes que decírmelo dos veces, viejo amigo.
Siempre estaré ahí para ti, prometido.