- No pasa nada, todo está bien, aquí no pasa nada.
Voy a cogerlo y a volver corriendo...
- Buenas noches, Annette.
- ¡Ah!
- ¡Ah! ¡Lo siento! No quería asustarte.
- ¡Ah, Ingrid! ¡Eres tú! Lo siento, creo que estoy
[cdb]algo nerviosa ahora mismo.
- No te preocupes, no pasa nada, pero, si me permites,
¿qué haces aquí fuera a estas horas de la noche?
- Se me olvidó un libro en el comedor
[cdb]y he vuelto a buscarlo.
- Qué casualidad, yo también me dirigía al comedor
[cdb]a buscar algo.
- ¡Vaya! ¡Pues podemos ir juntas! De verdad
[cdb]que me sentiría mucho mejor si vinieras conmigo.
- No estoy muy segura de por qué, pero vale.
- Caray, está muy oscuro...
- ¡Ay! ¡¿Qué... Qué ha sido eso?!
¡Creo que viene de esa hierba de ahí!
- ¿Mm? Seguramente sea otra lechuza. Podría ser...
- ¡Annette, para! Te vas a ir directa contra esa pila de...
- ¡Ay! ¡¿Quién ha puesto aquí estas cajas?!
- Cajas. Ay, Annette.
- Bueno, menuda odisea esta, pero al final
[cdb]lo hemos conseguido. Gracias, Ingrid.
- Me alegro de que nadie saliera herido, aparte de ti
[cdb]y de esas cajas, pero, si me permites, Annette,
¿le... tienes miedo a la oscuridad?
- Eh, sí, de hecho, me lleva dando miedo toda la vida.
Daría lo que fuera por que no me molestara,
[cdb]pero no puedo evitarlo.
- ¿Qué hay de ti, Ingrid? ¿No te da miedo? Es decir,
¡podría aparecer un fantasma de la nada y acecharte!
- La oscuridad no me molesta, no. Y como nunca
[cdb]he visto un fantasma, no me da miedo.
- Pero ¿no te da miedo pensar en ello? A ver,
¡imagínate a un cadáver alzándose de su tumba
[cdb]y viniendo a por ti con sus enormes dientes!
- En Galatea, teníamos historias de ese tipo.
A mis hermanos les gustaba contarlas
[cdb]cuando yo era pequeña.
- Pero, si fueran ciertas, no podríamos ir a ningún sitio
[cdb]sin toparnos con una horda de espectros.
- Mmm. Ya, supongo que es verdad..., pero me sigue
[cdb]costando sacarme la idea de la cabeza.
- Yo creo que sería genial si los muertos
[cdb]se convirtieran en fantasmas y pudiéramos
[cdb]verlos de nuevo.
- Pero, cuando alguien muere, se acabó.
No podemos volver a verlos ni a hablar con ellos.
- Sí, cuando alguien muere, desaparece para siempre.
- Razón de más para disfrutar del poco tiempo
[cdb]que tenemos, ¿no?
- Estoy de acuerdo. Después de todo, solo tenemos
[cdb]una vida para vivirla.
- En ese caso, ¡voy a volver yo solita!
- ¿Seguro? Ya nos ha costado bastante
[cdb]llegar hasta aquí.
- Si quiero vencer mis miedos,
¡mejor hacerlo mientras aún siga viva!
- La oscuridad sigue siendo bastante terrorífica,
[cdb]pero voy a intentar sobreponerme.
- Je. Ya podría aprender un par de cosas de ella
[cdb]y su optimismo. Solo se vive una vez... Mmm...