1. Oh, Annette. Buenos días.
  2. Hola, Lorenz. ¿Necesitabas algo?
  3. Sí, hay algo que tengo que decirte.
  4. Por favor, no me digas que quieres invitarme a salir.
  5. ¡Jamás se me ocurriría! Tan solo quería darte [cdb]la enhorabuena por tu diligencia, dado que es obvio [cdb]que está dando frutos.
  6. Eh... Gracias, supongo. ¿De qué va todo esto?
  7. He sido testigo de tus magníficas hazañas [cdb]tanto dentro como fuera del campo de batalla.
  8. Tales logros solo son posibles gracias [cdb]a un esfuerzo infatigable.
  9. ¡Esa clase de ingenio es impresionante, ya provenga [cdb]de una noble o de una joven corriente de baja cuna!
  10. (...)
  11. ¿Hay algún problema? Pareces una paloma [cdb]a la que acaba de alcanzar una ráfaga [cdb]de magia de viento.
  12. Es que ha sido muy espontáneo, eso es todo. Lo cierto es que no esperaba... que me elogiaras.
  13. No me digas eso. ¿De verdad te parece tan extraño [cdb]recibir un cumplido mío?
  14. Tan solo quería expresar mi más sincera admiración, [cdb]por no mencionar el malentendido que se interpone [cdb]entre nosotros desde hace tiempo.
  15. Pensé que sería mejor decir lo que pienso [cdb]antes de que la caprichosa mano del destino [cdb]vuelva a separarnos de nuevo.
  16. ¡Pfff! ¡Qué raro eres a veces!
  17. Y ahora te mofas de mí. ¿Me permites preguntar por qué? ¡No veo nada de raro en elogiar a una querida colega!
  18. Perdón. Lo siento. Me acabo de dar cuenta [cdb]de que estás diciendo todo esto en serio.
  19. ¿Acaso no era evidente? ¿Qué otra cosa podría ser [cdb]salvo sincero en mi deseo de enmendar nuestra antaño [cdb]dañada relación?
  20. Bueno, me alegra que aprecies mi esfuerzo, Lorenz. De verdad.
  21. Porque cuando me llamaste cría en aquel entonces, [cdb]parecía que menospreciabas todo el trabajo duro [cdb]que hice para entrar en la escuela de magia.
  22. Creo que una parte de mí ha buscado ganarse [cdb]tu aprobación desde entonces, así que es genial [cdb]que por fin ocurra.
  23. Se te da mejor la gente de lo que pensaba, Lorenz.
  24. Naturalmente, es el deber sagrado de un noble alzarse [cdb]sobre otros y evaluar su valía, después de todo.
  25. Pues, dado que tengo algo de noble, supongo [cdb]que podría aprender más sobre eso, si me enseñas.
  26. ¡Eso sería estupendo! En ese caso, de un noble a otra, [cdb]podrías unirte a mí para disfrutar de un almuerzo [cdb]y discutir asuntos...
  27. Mejor no. No me gustaría fastidiar [cdb]mi recién descubierta admiración por ti.
  28. ¿De veras? Qué desafortunado. Quizá alguna otra...
  29. Vaya, pero mira qué hora es, ¡será mejor que me vaya! ¡Tengo que hacer algo con toda esta [cdb]nueva motivación!
  30. Mmm...
  31. Bueno, no tiene importancia. Tan solo debo seguir [cdb]su ejemplo y trabajar sin descanso por conseguir [cdb]mis objetivos.
  32. ¡Pues yo, Lorenz Hellman Gloucester, [cdb]no debo aspirar a menos!
  33. ¡Ja, ja, ja, ja!