Claro, pero tendrá que ser breve.
Quizá no lo parezca, pero estoy bastante ocupado.
Mmm. ¿Te estás riendo de mi forma de responderte
[cdb]cuando me pides algo?
Eh, no te pongas así. Era broma. Podemos pasarnos
[cdb]horas hablando. Tengo todo el tiempo del mundo.
No hace falta. Solo quería transmitirte
[cdb]un mensaje de mi padre.
El conde de Ordelia, ¿eh? Adelante. Soy todo oídos.
No es ninguna novedad que tenga asuntos por aclarar
[cdb]con el Rey. Primero, la invasión imperial y, luego,
[cdb]los disturbios que se extienden por todo el territorio...
Nada de eso habría pasado si hubiera vigilado
[cdb]más de cerca a las Serpientes de las Tinieblas.
Espera, creo que lo estás entendiendo mal.
Mi padre no se está quejando de ti.
Solo quiere agradecerte que hayas acabado
[cdb]con las luchas en el Reino y que acudieras
[cdb]a restablecer la paz en nuestros territorios.
Además... está dispuesto a ofrecer plena colaboración
[cdb]con cualquier propuesta política del trono.
Solo tienes que pedirlo.
Aprecio el gesto. Siempre ha sido de gran ayuda
[cdb]contar con alguien tan abierto de mente.
Considera el mensaje entregado entonces.
Y, por favor, no le exijas más de lo que puede dar.
La ansiedad le afecta desde hace años y, últimamente,
[cdb]se ha empezado a dar cuenta de que el cuerpo
[cdb]no le responde tan bien como la cabeza.
Eso he oído. No te preocupes. Solo le pediré
[cdb]lo que resulte totalmente esencial.
Gracias, Claude. Me encargaré de todo lo que haga
[cdb]falta en nombre de mi padre.
Eh, con calma. Ya haces mucho ahora mismo.
Si asumes más tareas vas a desfallecer.
Y, sin embargo, no tengo más remedio. No puedo
[cdb]quedarme atrás ante los demás nobles de Leicester.
Además, debo conseguir que esta guerra acabe
[cdb]y pensar en cómo restablecer la paz y la estabilidad
[cdb]en los territorios de la Casa Ordelia.
Entiendo tu situación, pero todos necesitamos
[cdb]un descanso de vez en cuando. Seguro que el cuerpo
[cdb]te está pidiendo a gritos que pares un poco.
Estoy bien. Aunque es cierto que no disfrutaré
[cdb]de una vida larga, tampoco es que vaya a caer
[cdb]muerta de repente.
Estoy más sana que nunca. Te lo aseguro.
Sí, tienes buen aspecto. Pero hay algo en tu interior
[cdb]que te agobia, ¿verdad? Algo que los demás
[cdb]no conseguimos ver.
El cuerpo no te va a aguantar si sigues llevándolo
[cdb]al límite sin concederte tiempo para recuperarte.
Pero...
Escucha, Lysithea. Quiero que esta guerra termine
[cdb]pronto tanto como tú.
Y, cuando eso pase, ajustaré cuentas
[cdb]con las Serpientes de las Tinieblas.
En resumen, te interesa quedarte a mi lado.
(...)
Considéralo una orden de tu rey: deja de luchar
[cdb]como si no hubiera mañana.
Voy a seguir necesitando mucha ayuda cuando acabe
[cdb]la guerra. No puedes irte de este mundo
[cdb]antes de que empiece la diversión, ¿vale?
Entendido. Si es una orden directa de su majestad,
[cdb]supongo que no puedo negarme.
Ahora, si me disculpas. Quizá no lo parezca,
[cdb]pero estoy bastante ocupada.
¿Me habrá entendido de verdad? Sea como sea,
[cdb]tengo que poner fin a esta guerra cuanto antes.