- El té está delicioso.
No es lo bastante dulce para mi gusto,
[cdb]pero tiene un aroma magnífico.
- Oh, lo has notado.
Le he añadido un néctar de rosa difícil de encontrar.
- Eso explica su sabor único. Me gusta.
- Como se suele decir: cuanto más dulce sea el néctar,
[cdb]más dulce será el tiempo pasado en compañía.
- Sí, y le va tan bien a los dulces que... ¿Eh?
¡Oh, no! Nos los hemos acabado.
- Por desgracia, me temo que no nos quedan más.
No es fácil encontrar dulces en tiempos de guerra.
- Pero si deseas cualquier otra cosa,
[cdb]me desviviré por conseguirla para ti.
- Si se han acabado los dulces,
[cdb]creo que hemos terminado.
Que tengas un buen día.
- Aguarda. Tal vez no tengamos dulces,
[cdb]pero seguro que hay asuntos de los que quieres hablar.
- No. Que tengas un buen día.
- Lysithea, sé que no quieres hablar de ello,
[cdb]pero estoy al tanto de que tienes cierta...
ansiedad por formar parte del vulgo.
- No sé de dónde has sacado ese disparate,
[cdb]pero es mentira.
- Es cierto que quiero convertirme en una plebeya...
- Cuando termine la guerra, pienso renunciar
[cdb]a mi título y vivir en paz con mis padres.
Pero no estoy ansiosa, en absoluto.
- Debes de tener problemas graves
[cdb]si estás dispuesta a renunciar a tu título.
- Y, al menos, tendrás cierta inquietud
[cdb]sobre cómo es la vida de los plebeyos.
- Según lo que he oído, todos los nobles
[cdb]que han perdido su estatus lo están pasando mal.
- Si te aguarda un futuro así,
[cdb]es algo digno de preocupación.
- Hablas de nobles caídos en desgracia
[cdb]a los que les retiraron el título por algún motivo.
- Yo me desharé de los lujos de la nobleza
[cdb]por voluntad propia. No me juntes con esa gentuza.
- Ya veo.
En fin, permíteme hacerte una última pregunta.
- ¿Y si te convirtieses en una plebeya con una vida
[cdb]que trascienda la barrera entre las dos clases?
- Tienes experiencia como noble de cierta relevancia,
[cdb]sería terrible ver esa pericia desperdiciarse
[cdb]una vez te unas al proletariado.
- Le darías una perspectiva única a tu nuevo estatus,
[cdb]podrías usarla para cambiar el mundo.
- La nobleza escuchará cualquier sugerencia
[cdb]que tengas para mejorar la vida del público.
- Sí, sí. Es una idea muy bonita.
- Pero no significa nada para mí.
- La nobleza tiene el deber de preocuparse
[cdb]por lo que le conviene a la plebe y al mundo, ¿no?
- No puedo seguir aceptando la responsabilidad
[cdb]de lo que ocurre en Fódlan.
- Lo único que puedo hacer es vivir en paz
[cdb]con mis padres durante el tiempo
[cdb]que me quede de vida...
- Lysithea...
- Tu té estaba delicioso. Gracias.
- (...)