¡No! ¿No me digas que...? ¡Oh, sí!
Es mi plato favorito. Te lo agradezco.
Tú sí que me entiendes.
Acepto con gusto este delicioso bocado.
Bueno, supongo que la intención es lo que cuenta
[cdb]y no el sabor... o el olor... o la textura.
¿Una excursión? Ja, ja. Por supuesto.
Como ya sabes, no hay nadie más elegante que yo
[cdb]a lomos de un corcel.
Estas salidas contigo no han tardado en convertirse
[cdb]en todo un deleite para mí.
Tras un breve reposo,
[cdb]echemos una carrera hasta los árboles.
Cuidado. Ya sea uno humano o equino,
[cdb]siempre es fácil trastabillar en la maleza.
Qué panorama tan espectacular.
Adoro sentir que estoy por encima
[cdb]del resto del mundo...
Los lugares como este son perfectos
[cdb]para los encuentros amorosos.
¡Mas yo jamás haría algo así! Santo cielo...
Ahora comprendo el impulso de bramar tu nombre
[cdb]en un gran claro...
¡Saludos! ¡Soy Ferdinand von Aegir!
Ahora que lo mencionas, mi estómago también
[cdb]se está rebelando. Tan pronto como volvamos,
[cdb]pretendo comer como un ordinario plebeyo.
Permíteme. ¿Qué te parece... esta?
¡¿Dices que es venenosa?! ¡Santo cielo!
Permíteme. Sí, bueno, supongo que antes
[cdb]debo descubrir dónde se hallaría algo así... Mmm.
Me temo que esto es más difícil de lo que imaginaba.
A veces soy demasiado obtuso. Gracias a la Diosa
[cdb]que tienes el talento necesario para resolver
[cdb]estos contratiempos.
¡No te mofes de mí! ¿Eh? ¿Lo dices en serio?
Bueno, en ese caso, marchemos.
No temas, yo tomaré el timón. Lo creas o no,
[cdb]tengo mucha experiencia con estos menesteres.
No te preocupes, [MFH:amigo mío_amiga mía]. Vengo preparado,
[cdb]he traído medicina para paliar las náuseas.
Admiro lo mucho que te esfuerzas por conocernos
[cdb]a todos. Debería seguir tu ejemplo.
Cuando era un mozalbete,
[cdb]mis padres a menudo me llevaban a montar a caballo.
Qué buenos tiempos...
Tu caballo se porta muy bien.
Debes de tener buena mano con los animales.
Ah, ¡la llamada del gran horizonte! Eh, mis disculpas.
No sé qué extraño sentimiento me ha invadido.
Espero poder acompañarte algún día por el territorio
[cdb]de los Aegir. Es un lugar acogedor ubicado
[cdb]a la orilla del más calmo y hermoso de los mares.
La nobleza de Fódlan se enfrenta a una crisis,
[cdb]y considero que mi deber sagrado es lograr
[cdb]que la superemos.
Hubert no tolera que me involucre en actos turbios.
Ese hombre necesita relajarse un poco.
Oh, disfruto del té, de montar a caballo,
[cdb]de coleccionar armas, de los paisajes de montaña...
Las actividades normales para un noble.
Mmm. No se me ocurre nada, salvo, tal vez,
[cdb]algunas comidas que no me sientan bien.
En buen apuro me has puesto.
Bueno, si de verdad quieres saberlo,
[cdb]sueño con encauzar al Imperio hacia un futuro mejor.
Me aquejan incontables problemas,
[cdb]mas lo que más tengo en mente es
[cdb]el porvenir del territorio de los Aegir.
El ánimo de mi madre es nefasto tras lo sucedido
[cdb]con mi padre, y me temo que su salud ya era
[cdb]demasiado mala de por sí.
Me temo que, por ahora, solo te he mostrado
[cdb]mi ineptitud. Tal vez en el futuro recordemos
[cdb]este día y nos riamos juntos.
Somos buenos amigos y grandes rivales,
[cdb]ambas cosas nos hacen fuertes.
Tengo fe en que el Imperio prevalecerá.
Todo noble que se precie sabe blandir
[cdb]cualquier arma con elegancia,
[cdb]ya sea una espada, una lanza o un hacha.
Creo que eres todo un misterio,
[cdb]lo que, a su vez, es tu mejor cualidad.
Te considero como [MFH:un_una] gran camarada
[cdb]de inquebrantable moral y con más determinación
[cdb]que doce personas juntas.
Todavía tengo mucho trabajo por delante,
[cdb]mas sigo avanzando como puedo para traer
[cdb]un futuro mejor.
A veces recuerdo a mi padre y...
Bueno, todo eso ya es parte de mí.
Debo aprender a vivir con ello.
He estado pensando en dejarme crecer el cabello.
¿Qué longitud crees que sería la apropiada?
No logro comprender la fijación que tienes conmigo,
[cdb]mas te permito que goces de mi imagen
[cdb]cuanto quieras.
¿Acaso tengo un insecto en la cara?
¡¿Cómo ha logrado eludir mis defensas?!
Si pretendes contemplar mi rostro,
[cdb]te devolveré el favor por decuplicado.
Quedas [MFH:advertido_advertida].
Admítelo, soy la clara imagen de la nobleza perfecta,
[cdb]se mire por donde se mire. Sí, bueno, has de saber
[cdb]que tener este buen aspecto requiere esfuerzo.
El abrigo fue un regalo de mi padre.
Ordenó que me lo hiciesen a medida...